Publicado el 13 de nov, 2019

Nada detiene su fuerza y corazón: Mardones se viste de oro en Dubai

Francisca es un ejemplo vivo de que los sueños se cumplen. Desde muy pequeña se imaginaba en lo más alto del podio alzando la bandera de Chile. Jugando algún deporte, el que fuese.

Así lo ha hecho, y varias veces. Incluso después de sufrir uno de los golpes anímicos más fuertes de la vida, horas después de perder a su padre, se quedó con el oro en el lanzamiento de la bala y de paso, sumó un nuevo récord a nivel global en el Mundial Paralímpico que se disputa en Dubai. La Ministra Cecilia Pérez destacó este logro porque “llegaste a la cima del mundo, con una histórica medalla de oro y un récord mundial en lanzamiento de la bala que no lo lograste sola. Tu inspiración y fuerza también fue la que tu padre te envío desde el cielo”.

Francisca sufrió un accidente a los 22, un trance que no detuvo sus anhelos de infancia. Después de cuatro años de recuperación, Pancha quiso aventurarse en algún deporte y lo hizo en tenis. La zurda aprendió rápidamente, y con mucha disciplina y ahínco se metió entre las 11 mejores del mundo y se convirtió en una de las mejores de Chile.

En los Juegos Panamericanos de Río de Janeiro 2007 fue bronce. Medalla que repitió cuatro años más tarde en Guadalajara. También participó en los Juegos de Londres en 2012 y de Río en 2016.

Un nuevo accidente doméstico la hizo redirigir su foco. A fines de 2017 fijó su interés en el atletismo, específicamente en el lanzamiento de la bala donde ha sido acompañada por el entrenador mexicano, Rodolfo Ortiz. En ese nicho, Pancha se propuso prolongar su carrera deportiva. Y vaya qué bien escogió. Pese a que hace solo dos años se dedica a esta disciplina, alcanzó la gloria en Dubai. En pleno desarrollo del Mundial Paralímpico, la chilena se enteró del fallecimiento de su padre. Optó por competir, inspirada en el amor, la fuerza y el coraje de su figura y lo hizo. Consiguió ser la mejor en el lanzamiento de la bala. Y no solo eso, se alzó con un nuevo récord mundial. ¡Deportista ejemplar!